Cuando comparto situaciones que vivo con mi hijo, públicamente, lo hago con el fin de servir de ayuda a muchas otras personas que se sientan identificadas, o no.
Especialmente me parece interesante dar ideas o herramientas (desde mi conocimiento de madre) a esos profesionales que trabajan con perfiles diversos en sus aulas.

La alteración de la estructura diaria, bien sea de espacios, de personas de referencia, de rutinas, en muchas ocasiones genera desconcierto, stress, que muchos niños no saben gestionar y más si no lo pueden verbalizar, así que hoy acompaño de unos consejos que hace poco ordenaba en mi cabeza.

Como consejo, que no siempre funciona, o no funciona siempre del mismo modo, pero por lo menos debemos intentarlo y tener herramientas.

* Anticipar situaciones, no improvisar, por poco tiempo que se tenga hay que priorizar.

* Explicarle con apoyo visual el motivo por el que falta esa persona, o el porqué del cambio de rutina, y que vamos a hacer en su lugar.

* Ser flexibles ante su inflexibilidad, dentro de las normas tenemos que hacer ajustes, si la situación lo requiere.

* Tener recursos que son de su máximo interés e intentar desviar el foco en un momento puntual para después poco a poco reconducir e intentar volver a donde lo dejamos.

* El dibujo de las situaciones, las listas de instrucciones (en su caso particular), la organización visual de lo que está sucediendo le dará seguridad, bajará su nivel de ansiedad y será más sencillo manejar la situación.

* Ejercitar la paciencia y no ponerse más nerviosos que él, porque es difícil, a mí me pasa pero hay que intentarlo, es un aprendizaje constante, cada día es diferente y siempre acaba saliendo el sol.

Ojalá sea de ayuda, gracias